lunes, 24 de marzo de 2014

“Me detuvieron porque tenía fotos del Che Guevara”

Día de la memoria, por la verdad y la justicia

En agosto del año 1976, Raquel Martínez Paz, una vecina de Las Termas de Río Hondo, fue detenida en la capital de esta provincia, por el simple hecho de tener fotos y posters del “Che Guevara” en las paredes de su casa. Aunque en la actualidad, para algunos, la imagen de esta figura latinoamericana se ha convertido en otro objeto de consumo, en ese momento el nombre y la imagen de ese símbolo eran considerados “sospechosos y peligrosos” por la dictadura que gobernaba el país desde el 24 de marzo de ese año, hasta 1983, secuestrando, torturando y aniquilando a más de 30.000 personas en todo el país.

Los Martínez Paz, eran una humilde familia de Chauchillas, paraje ubicado a más de 15 kilómetros del centro turístico, que lentamente fue migrando a Las Termas y a la capital de esta provincia. Cuando Raquel tenía 9 años, una parte de su familia se radicó en la capital de esta provincia, y allí realizó sus estudios primarios y secundarios.



 A los 20, mientras estudiaba para convertirse en maestra, comenzó a militar en el Partido Revolucionario de los Trabajadores –PRT- y colocó fotos y posters de Ernesto el “Che” Guevara en las paredes de su domicilio. “En agosto de 1976 los policías allanaron mi casa –recordó- y me encontraron estas fotos. Después descubrieron que militaba en el PRT y me detuvieron”.

Como a muchas otras personas le “armaron” una causa por conformar una supuesta asociación ilícita para cometer delitos, y la encerraron en un sótano del Servicio de Inteligencia del Estado –SIDE- y luego la trasladaron a un penal de Córdoba.

Allí quedó detenida un tiempo, hasta que en el año 1978 la trasladaron a un penal de Buenos Aires. “Nos trasladaron a Devoto para tenernos como rehenes durante el mundial –reveló-, para mostrarle al mundo, que estábamos detenidos en buenas condiciones y correctamente, como una especie de pantalla”.

Finalmente, en el año 1981 quedó a disposición del ejecutivo nacional, y fue liberada de manera condicional, ya que periódicamente debía presentarse en la Seccional 40 de Las Termas.

“Yo sobreviví, pero muchos conocidos y amigos, todavía están desaparecidos, y ese es un daño irreparable. No sólo aniquilaron personas: aniquilaron sueños, luchas, e ideales”.
En la actualidad, Raquel Martínez Paz, está jubilada como docente, es dirigente del club Barrio Adela, y tiene un dibujo de Ernesto el Che Guevara en una de las paredes de su domicilio.


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